La Pampa consideró una falta de respeto la ausencia de Alfredo Cornejo. En su lugar, el gobernador Cornejo envió a su vicegobernadora, la también radical Laura Montero, pero sin facultades para tomar decisiones importantes en este tema.
La
reunión convocada por la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación para
hablar sobre el manejo del río Atuel, fracasó ayer a raíz de la ausencia del
gobernador mendocino Alfredo Cornejo.
Para el gobernador Carlos Verna, el faltazo de Cornejo fue “una falta de
respeto” hacia nuestra provincia. Su temor de encontrarse con una postura
mendocina que en realidad no implica ningún avance, se vio cristalizada en los
hechos.
En su lugar, el gobernador Cornejo envió a su
vicegobernadora, la radical Laura Montero, pero sin facultades para tomar
decisiones importantes en este tema. De hecho, Montero se limitó a hablar de
obras sobre el cauce y se negó a abordar el tema del comité de cuenca que
pretende conformar La Pampa. La reunión, desarrollada en el Palacio de Hacienda,
fue encabezada por el subsecretario de Recursos Hídricos de la Nación, Pablo
Bereciartúa, quien había convocado a las partes a esa instancia de diálogo.
“Fue frustrante”, sintetizó Verna al retirarse de
la reunión. “Dejamos en claro que la ausencia fue una falta de respeto para el
subsecretario de Recursos Hídricos (Pablo Bereciartúa, quien había convocado a
las partes) y para la provincia de La Pampa porque no tuvo ni siquiera la
delicadeza de avisar”, señaló Verna.
“Cuando
el subsecretario planteó la posibilidad de que discutieran los presentes le
pregunté a la vicegobernadora si tenía un poder para tomar decisiones o si sólo
iba como vicegobernadora”, añadió. “Cuando me contestó que iba solamente como
vicegobernadora expliqué que automáticamente la reunión dejó de tener sentido,
porque lo único que La Pampa está dispuesta a discutir es la constitución del
Comité de Cuenca del Río Atuel”. La creación de ese comité de cuenca implica la
conformación “de un Consejo de Gobierno que deben firmar los gobernadores y el
ministro del Interior y que después deben ratificar las legislaturas
provinciales y el Congreso de la Nación”, amplió el mandatario.
Verna asistió acompañado por el fiscal de Estado
pampeano, José Vanini, el ministro de Gobierno, Daniel Bensusan, el de Obras
Públicas, Julio Bargero, el secretario de Recursos Hídricos, Javier Schlegel, y
el asesor en temas hídricos, Juan Pablo Morisoli, entre otras autoridades.
También lo hizo el diputado nacional Martín Maquieyra
(Pro).
Mendoza sólo habla
de obras.
La vicegobernadora Montero reiteró
en la reunión la posición mendocina de exigir obras a los gobiernos Nacional y
de La Pampa como única alternativa para solucionar el diferendo por el río. Fue
una postura similar a la que expresó hace dos semanas cuando envió un correo
electrónico al gobernador Verna proponiendo obras y, en simultáneo, pidiendo que
La Pampa abandonara el juicio.
La respuesta del gobernador fue la misma que
expresó a través de una nota: “una vez constituído el Comité de Cuenca, el
Consejo de Gobierno le encargará al Comité Técnico Integrado por los técnicos de
las provincias, las acciones a desarrollar en la cuenca”.
Fue exactamente la misma respuesta que Verna le
dio a Montero tras aquel correo electrónico.
Una nota
a la CSJ.
Verna también explicó que, a través
de las autoridades provinciales dejó asentado por escrito en la Corte Suprema de
Justicia que la convocatoria había sido realizada por la Subsecretaría de
Recursos Hídricos a representantes de ambas provincias para tratar la
problemática del Atuel y que su presencia en la misma “no implicaba renuncia
alguna a los derechos que la Provincia de La Pampa demanda y sostiene en el
marco del expediente”.
“Dejamos en claro eso
para que Mendoza no lo pudiera usar como un subterfugio ni que dijera que esta
reunión implicaba nuevos plazos, ni desistimiento ni paralización de la acción
judicial puesto que no estamos dispuestos a esto: queremos que la Corte se
expida en el menor tiempo posible”, afirmó el Gobernador.
Finalmente, el mandatario resaltó la buena
predisposición de Bereciartúa. “Nos planteó la posibilidad de ofrecer un ámbito
de debate entre las provincias, y le dijimos que estamos dispuestos a asistir en
tanto Mendoza acepte la creación del Comité de Cuenca, que es lo único que
estamos dispuesto a discutir”.
Para
Maquieyra, “fue una vergüenza”
El diputado
nacional por La Pampa, Martín Maquieyra (PRO-Cambiemos), asistió ayer a la reunión convocada por
el subsecretario de Recursos Hídricos, Pablo Bereciartúa, junto al gobernador,
Carlos Verna, y a la que estaba citado el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, pero en su lugar asistió la
vicegobernadora Laura Montero.
“Es una lástima
y una vergüenza que no haya asistido el gobernador de Mendoza a la reunión por
el conflicto por el río Atuel. Nación y el gobernador Carlos Verna tuvieron toda
la predisposición para dar los primeros pasos para la solución pero no vemos una
respuesta positiva desde el gobierno mendocino”, declaró Maquieyra.
La reunión tuvo una corta duración ya que se
esperaba la llegada del gobernador Cornejo pero sobre la hora se avisó que no
asistiría y que en su lugar lo haría Montero.
“Sé lo importante que es para el oeste pampeano
que haya agua en sus tierras, para la producción, por eso tenemos que lograr que
el Atuel vuelva a circular y voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para que
así sea”, enfatizó el diputado.
Maquieyra
destacó “el cambio en comparación con los gobiernos anteriores” que percibe con
esta gestión. “Veo al Gobierno Nacional decidido a participar y ser árbitro en
el conflicto y al Gobierno Provincial de La Pampa plantado con este reclamo
pampeano que en los últimos años no se daba desde ninguna de las partes. No veo
voluntad del gobierno mendocino de crear el Comité de
Cuenca”.
“No van a
desistir”
El intendente de General Alvear,
Walter Marcolini, consideró ayer que “La Pampa no va a desistir del juicio por
el tema medio ambiental, lo que obliga a seguir con la estrategia de defensa” de
Mendoza.
“La realidad es que Mendoza no ha
incumplido con La Pampa, ellos no han tenido nunca una postura para resolver la
situación. En General Alvear dependemos del río Atuel y tenemos que defender
eso”, añadió.
“No están buscando solución
definitiva, porque en La Pampa ha construido muchos acueductos para utilizar el
río Colorado, sin embargo no lo hizo con el Atuel”, puntualizó.
En cuanto al dictamen de la ONU, basado en
aspectos relacionados con el derecho al agua, consideró que “es un planteamiento
erróneo, porque no es que se le esté negando el agua a La Pampa, pero ellos
tampoco están colaborando”.
“No podemos
permitir que La Pampa pretenda victimizarse, esto es un conflicto netamente
político más que social. Está peleando por agua para algunos habitantes mientras
que el ganado vacuno está recibiendo y consumiendo agua mineral de Punta de
Agua. En más de 60 años no ha habido actividad agrícola en el lugar en donde hoy
reclaman agua”, concluyó.
Bereciartúa
lamentó el final
El subsecretario de Recursos
Hídricos de la Nación, Pablo Bereciartúa, lamentó que el encuentro que él mismo
había convocado no haya dado los frutos que esperaba, que era principalmente el
inicio de un acuerdo entre La Pampa y Mendoza respecto al Atuel. Dijo que
volverá a intentarlo, pero que antes pedirá a cada jurisdicción que defina la
viabilidad del encuentro, para no tropezar otra vez con la misma situación.
“La Nación tiene la obligación de sumir un rol de
interlocutor entre las provincias, sobre cuando los conflictos son
interjurisdiccionales”, sostuvo ayer el subsecretario Bereciartúa al analizar el
desarrollo y resultado del encuentro que convocó para hablar del Atuel.
“Mendoza
definió que su presencia estaría en manos de la vicegobernadora (Laura Montero)
y entiendo que está bien”, consideró. “Pero también entiendo las declaraciones
del gobernador de La Pampa, que me parecen genuinas y las respeto, porque creo
que cada jurisdicción tiene el derecho a manifestarse y expresar en qué términos
quiere avanzar”, aseguró.
“Lo que lamento es
que este esfuerzo que hemos realizado no se haya podido plasmar en el inicio de
un acuerdo, como era nuestra intención”, reconoció.
El
subsecretario alentó la expectativa de que este objetivo de sentar los cimientos
de un acuerdo interprovincial “puedan ser posible en un futuro, incluso en el
corto plazo” y anticipó que volverá a convocar a las partes. “A mi me van a
encontrar siempre cuando se trate de dialogar y buscar consensos”.
Lo que sí, anticipó, ante una nueva convocatoria
reclamará a las partes una “confirmación previa” de la viabilidad del encuentro
para evitar fracasos como el de ayer. “Que cada provincia nos diga si considera
que están dadas las condiciones iniciales para que se pueda llevar adelante la
toma de decisiones que necesitamos para esta agenda de trabajo”, precisó el
subsecretario.
“Es importante que las partes se manifiesten,
pero que no se nieguen las posibilidades de nuevos encuentros y de futuros
acuerdos, que es lo que intentamos desde acá”,
concluyó.
Una
reunión fundacional en el Cohife
Ocho
provincias argentinas y la Nación firmaron ayer un acta de carácter
trascendental para avanzar en el uso conjunto y consensuado de la cuenca del río
Desaguadero, en este caso con un carácter ampliado ya que, como reclama La
Pampa, también lo hicieron provincias de la cuenca del Colorado. El encuentro
significó un importante respaldo a los reclamos pampeanos hacia el gobierno
nacional y a las provincias que en forma unilateral utilizan recursos
compartidos como los ríos interprovinciales. Se decidió crear una comisión de
seguimiento que se encargará de evitar “efectos negativos” en el uso de los ríos
y profundizará el conocimiento de la región.
“La
Cuenca del Desaguadero comprende a un porcentaje muy grande del territorio
argentino, más de 22 por ciento de su superficie”, sostuvo ayer el subsecretario
de Recursos Hídricos de la Nación, Pablo Bereciartúa, al valorar la
trascendencia del acuerdo que encabezó ayer por la mañana con la participación
de todos los representantes provinciales, excepto uno. “Creo que esta reunión ha
sido muy positiva y va a ser un punto de referencia de aquí en más”,
vaticinó.
El encuentro tuvo lugar en la sede del Consejo
Hídrico Federal (Cohife) y contó con la presencia de representantes de las
provincias de La Rioja, San Juan, Mendoza, La Pampa, Neuquén, Río Negro y Buenos
Aires. Solo faltó San Luis, que anticipó su imposibilidad de estar presente. “La
presencia de Mendoza y San Juan fue muy importante, y también de Buenos Aires y
Río Negro, por eso hablamos de una cuenca ‘ampliada’ del Desaguadero”, explicó
Bereciartúa.
La reunión tuvo un carácter “muy productivo”
porque cada jurisdicción pudo expresar sus preocupaciones y sus pretensiones en
torno a los ríos de la región. Como pieza fundamental de trabajo se tomó el
Estudio Integral de la Cuenca del Desaguadero que hizo la Universidad de Buenos
Aries entre los años 2007 y 2009 y que tuvo precisamente a Bereciartúa como
coordinador del equipo de investigadores. “Fue un esfuerzo muy grande de
recopilación de antecedentes e información que está plasmado en varios tomos”,
recordó el subsecretario en diálogo con LA ARENA.
Acta
fundacional.
El dato sobresaliente de la
reunión de ayer fue la firma de un acta entre todos los presentes dando vida a
una “Comisión de Seguimiento del Estudio de la Cuenca del Desaguadero”, la que
tendrá una conformación formal y se integrará con representantes de todas las
jurisdicciones de la región, con la Nación como elemento convocante y función de
coordinación.
Todas las jurisdicciones
presentes ayer en el Cohife firmaron este acta y validaron este paso fundamental
que se logró en pos del uso conjunto de los ríos interprovinciales y el manejo
de la cuenca.
“Es una avance significativo,
porque ha generado un acta-acuerdo en
base a una agenda concreta de trabajo”, subrayó Bereciartúa.
Ayer se
definieron lo que serán los dos objetivos principales de la comisión de
seguimiento. El primero de ellos será tomar los recaudos necesarios para que la
situación actual no se agrave ni haya consecuencias negativas para las
jurisdicciones; y el segundo, generar una agenda de trabajo en base a una nueva
fase del Estudio Integral de la cuenca.
Esto
último implica la puesta en funcionamiento de una serie de instrumentos de
medición en todo el territorio, en puntos ya existen y en otros nuevos, y el
desarrollo de modelos teóricos que permitan contar con alertas tempranas de
eventos y favorezcan la capacidad de tomar decisiones de gestión del recurso
hídrico en el futuro.
“Realmente hemos dado un paso fundamental y este
acta así lo ratifica”, refrendó Bereciartúa.
Sistema o
cuenca.
Un dato llamativo es que el nombre
formal que tendrá la comisión creada ayer será el de Comisión de Seguimiento del
Sistema del Desaguadero, evitando por lo menos en su título la referencia al
concepto de cuenca. El cambio fue pedido por el delegado mendocino en el
encuentro -un representante del
Departamento General de Irrigación- y
se fundamenta en cuestiones legales.
“Está más
atado a las connotaciones legales, debido a los conflictos entre las
provincias”, reconoció Bereciartúa. “En la práctica el territorio es el mismo,
pero es cierto que el concepto de cuenca tiene implicancias legales, y para
algunas provincias más que para otras”.
La
Pampa es una de ellas, que reclama constantemente el cumplimiento de la Ley de
Gestión Integral de Aguas, ley nacional 25.688, que en uno de sus artículos
ordena crear comités de cuenca para gestionar los ríos de carácter
interprovincial.
Estaba invitado pero no fue. El gobernador de
Mendoza, Alfredo Cornejo, no estuvo
esta tarde en la reunión convocada por Nación para analizar la problemática en
torno al río Atuel y dialogar en una misma mesa con La Pampa y Mendoza.
Sí asistió el gobernador pampeano, Carlos Verna.
Por Mendoza fue la vicegobernadora Laura Montero.
La reunión había sido convocada por la
Subsecretaría de Recursos Hídricos de La Nación, a cargo de Pablo Bereciartúa, y
se esperaba contar con los dos gobernadores. Verna llegó puntual con la
intención de insistir en la necesaria conformación del comité de cuenca del río
Atuel. Mendoza, en cambio, pensaba plantear la realización de obras sobre el
curso del río pero es conocida su postura de evitar el uso compartido de las
aguas y las decisiones sobre su manejo, por lo que se descontaba que no estaba
en sus planes plantear el comité de cuenca.
Inmediatamente después de salir del Ministerio de
Hacienda, en Buenos Aires, donde se realizó la reunión, el gobernador Verna dijo
sobre la actitud de Cornejo: “Fue frustrante. Dejamos en claro que la ausencia
fue una falta de respeto para el subsecretario de Recursos Hídricos y para la
provincia de La Pampa porque no tuvo ni siquiera la delicadeza de avisar”. El
gobernador pampeano asistió acompañado por el fiscal de Estado, el ministro de
Gobierno y el Secretario de Recursos Hídricos entre otras autoridades y
asesores.
Sin poder de
decisión.
“Cuando
el subsecretario planteó la posibilidad de que discutieran los presentes le
pregunté a la vicegobernadora si tenía un poder para tomar decisiones o si sólo
iba como vicegobernadora. Cuando me contestó que iba solamente como
vicegobernadora expliqué que automáticamente la reunión dejó de tener sentido,
porque lo único que La Pampa está dispuesta a discutir es la constitución del
Comité de Cuenca del Río Atuel, y la creación del Consejo de Gobierno que deben
firmar los gobernadores y el ministro del Interior y que después deben ratificar
las legislaturas provinciales y el Congreso de la Nación”, amplió el
mandatario.
La vicegobernadora reiteró la
posición mendocina de exigir obras a los gobiernos Nacional y de La Pampa. En
ese sentido, la respuesta del gobernador fue la misma que expresó a través de
una nota: “Una vez constituido el Comité de Cuenca el Consejo de Gobierno le
encargará al Comité Técnico integrado por los técnicos de las provincias, las
acciones a desarrollar en la cuenca”.
Verna
explicó que a través de las autoridades provinciales dejó asentado por escrito
en la Corte Suprema de Justicia que la convocatoria había sido realizada por la
Subsecretaría de Recursos Hídricos a representantes de ambas provincias para
tratar la problemática del Atuel y que su presencia en la misma “no implicaba
renuncia alguna a los derechos que la Provincia de La Pampa demanda y sostiene
en el marco del expediente”.
“Dejamos en claro
eso para que Mendoza no lo pudiera usar como un subterfugio ni que dijera que
esta reunión implicaba nuevos plazos, ni desistimiento ni paralización de la
acción judicial puesto que no estamos dispuestos a esto: queremos que la Corte
se expida en el menor tiempo posible”, afirmó el gobernador.
Finalmente, el mandatario resaltó la buena
predisposición de Bereciartúa. “Nos planteó la posibilidad de ofrecer un ámbito
de debate entre las provincias, y le dijimos que estamos dispuestos a asistir en
tanto Mendoza acepte la creación del Comité de Cuenca, que es lo único que
estamos dispuesto a discutir”.